En realidad se dice que el país ha vivido por encima de sus posibilidades reales. Esta expresión no implica que todos seamos culpables de la crisis.
Tu puedes no haberte endeudado ni haberte gastado más de lo que ganabas, pero puedes haber vivido por encima de lo que la economía real de España te habría permitido en condiciones normales. Lo explico:
En condiciones normales, la inversión y el ahorro tienden a estar en equilibrio. Cuando alguien invierte dinero, es porque lo ha ahorrado previamente o porque lo ha tomado prestado de alguien que lo había ahorrado. Si se pide más dinero prestado (para invertir) del que la gente ahorra, los intereses tienden a subir frenando esas ansias de inversión. Es decir, si tu tienes un dinero ahorrado y mucha gente te pide prestado ese dinero, se lo prestarás a aquel que te ofrezca un mayor interés.
El problema vino cuando los bancos centrales (vinculados a la política) empezaron a manipular los tipos de interés para expandir el crédito, incluso fabricando más dinero. Aquí vino cuando, se produjo un incremento de los préstamos e hipotecas sin que aumentaran proporcionalmente los tipos de interés, y se produjo un desajuste entre ahorro e inversión. La sociedad en conjunto invertía más de lo que ahorraba.
Gracias a esa situación, la actividad económica creció muchísimo, pero era un crecimiento que no se correspondía con las posibilidades reales de España. Gracias a ese crecimiento, tú o tu familia pudisteis llegar a tener unos salarios que os permitían vivir a un nivel de vida mayor al que habríais tenido en ausencia de burbuja. Esto es cierto e indiscutible, y no quiere decir que sea culpa nuestra.
Aunque bien es cierto que millones de españoles se creyeron eso de que los pisos nunca bajarían de precio y se hipotecaron comprando viviendas que no podían pagar. También otros muchos miles de españoles han sido poco sensatos endeudándose para irse de vacaciones, cambiar los electrodomésticos, etc.
Por otra parte, gracias a la burbuja, el estado incrementó muchísimo sus ingresos (hasta unos 400.000 millones de euros anuales), por lo que se creyó un país rico y se dedicó a construir más líneas de alta velocidad, autovías, aeropuertos, etc. También nos acostumbró a la población a proporcionarnos todo tipo de comodidades: subvenciones, becas, subsidios, más y mejores hospitales y centros de saludo, escuelas super equipadas, etc.
La población nos hemos acostumbrado a tener un nivel de vida que no se corresponde con la capacidad real de España. Ahora hay que asumir la realidad: nuestros sueldos no pueden ser los mismos que los de un país de primer nivel, nuestros hospitales y colegios no pueden ser los de un país rico, no podemos tener las mejores carreteras y lineas de ferrocarril de toda Europa. Pero la gente parece no asumirlo.
Es cierto que sobran políticos y sus privilegios, y eso hay que atajarlo. Pero eso es sólo la punta del iceberg.
¿La culpa es de la banca privada? Eso es discutible: la banca privada se limitó a utilizar las herramientas y los privilegios que los gobiernos, a través de los bancos centrales, les proporcionó, del mismo modo que cualquier empresa y ciudadano hace uso de lo que el Estado le pone a su disposición. Además, los bancos que entran en pérdidas no son bancos privados, sino que son cajas de ahorros, que son una especie de banca pública (sin propietario, administradas por políticos y sindicatos).
¿Es una crisis del capitalismo? En ningún caso. Al contrario, es una crisis causada por el intervencionismo y la planificación central (socialismo puro y duro) de los bancos centrales, por la regulación del suelo en España que ha multiplicado los efectos de la especulación (ya sabes, eso de "hoy puedes construir aquí y sólo aquí, mañana a lo mejor te dejo construir allí"), y por la rigidez del mercado laboral (en España hasta hace unos meses era más fácil cerrar una empresa que despedir a los trabajadores que sobran).